Gracias al uso de implantes de pómulos se pueden conseguir contornos bellos y definidos en la zona de las mejillas. Los implantes, que suelen ser de gel de silicona, pueden insertarse y fijarse en el lugar deseado a través de una incisión en la cavidad oral.
Por lo general, un aumento de pómulos (conocido técnicamente como malarplastia) se puede realizar de dos maneras: mediante el uso de implantes o bien a través de una transferencia de grasa autóloga. Ambos métodos de tratamiento suelen realizarse en régimen ambulatorio con anestesia local o en sueño crepuscular. Antes de la operación, el especialista responsable del tratamiento decide qué técnica quirúrgica es la más adecuada y le informa exhaustivamente sobre los riesgos asociados y las posibles complicaciones de la intervención.
Si surgen complicaciones tras un aumento de pómulos realizado por motivos puramente estéticos y son necesarios tratamientos posteriores, las compañías de seguros médicos no suelen cubrir los gastos o no los cubren en su totalidad, aunque el tratamiento sea necesario desde un punto de vista médico. En este caso merece la pena contratar el seguro de gastos de seguimiento safe4beauty, que ofrece a los pacientes una protección óptima contra los riesgos financieros.